Día de sol y tormenta en el que el presidente Pauline nos ha llevado en "barco" por las calles de La capital junto al Hermano Salvador, el Padre Antonio, las monjas Loli y Amparo, Aruna, Sammi, Beatriz... Todos ellos compañeros de experiencia que, año tras año, hacen posible que este proyecto siga adelante.
Día que hemos empezado con una misa típica de la zona en la Catedral para dar paso a una visita a la Salle, a Pissy, a Song Ba y a Badenya.
Día en el que también ha habido tiempo para repostar en un bar "maki", para repartir ropa a las mujeres de Burkina y para preparar ordenadores y proyectores para las jornadas de mañana.
Día de reencuentros para algunos y de presentaciones para otros que por primera vez nos unimos a esta gran iniciativa.
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